Saber el riesgo de la depreciación del activo inmobiliario. Las sociedades de tasación comenzarán en el mes de octubre a incluir en sus tasaciones la situación macroeconómica nacional y de la comunidad autónoma o provincia; el mercado inmobiliario local y las características físicas y funcionales del inmueble. De esta manera, el comprador sabrá el riesgo del inmueble de perder valor durante los 6 años siguientes.
La Asociación Española de Análisis de Valor (AEV), que agrupa a las principales tasadoras con una cuota de mercado superior al 90%, ultima los detalles de esta nueva información que incluirán las tasaciones a partir del último trimestre de este año. Calcula tu hipoteca aquí.
Cómo será el sistema de puntuación
El sistema de puntuación será muy similar al utilizado por las agencias de ratings como Standard & Poor’s, Moody’s y Fitch otorgan a empresas, productos financieros y estados soberanos. En las nuevas tasaciones ser analizarán tres áreas y cada una recibirá una nota.
La AEV explica que la calificación constará de un conjunto de tres notas (tipo AAA, ABD, por ejemplo). La primera se referirá a la situación macroeconómica nacional y de la comunicad autónoma o provincia donde se ubique el inmueble. En segundo lugar, se valorarán los aspectos más importantes del mercado inmobiliario local y en tercer lugar se analizará la casa en función de sus características físicas y funcionales, tales como si está ubicada en zonas inundables o de alto riesgo sísmico, si es un semisótano o se localiza en un bajo en patio interior.
La medida tiene en cuenta que, estadísticamente, la mayor parte de los créditos que resultan fallidos lo son entre el tercer y el sexto año desde la concesión. En ese periodo es en el que es más importante para una entidad financiera tener la seguridad de que el valor de su garantía hipotecaria no ha sufrido una depreciación respecto al momento en el que fue otorgado el crédito.
También se tendrán en cuenta los okupas
Otra novedad en la elaboración de las tasaciones es un asunto de actualidad: las viviendas okupadas. Así, la presencia de okupas en el entorno de un inmueble será tenida en cuenta a la hora de realizar la valoración, como una de las características físicas y funcionales de la propiedad.
En estas nuevas tasaciones también se tendrán en cuenta factores como zonas inundables, de alto riesgo sísmico y localizaciones atípicas (semisótanos, patios interiores, etc.).
A partir de octubre
La idea inicial es que estas nuevas tasaciones se empiecen a utilizar en el mes de octubre de 2018. En principio estarán disponibles para propietarios y bancos (que se servirán de todos los datos anteriores para valorar la concesión de préstamos para la compra de vivienda), aunque el objetivo de la asociación es que los cambios poco a poco se trasladen a otros activos inmobiliarios como las oficinas o los centros comerciales.
