Cualquier persona que tenga un trabajo, ya sea por cuenta propia o por cuenta ajena, puede solicitar una hipoteca.
Si bien es cierto que las entidades financieras, en caso de que el titular de la hipoteca sea autónomo, pueden exigirle que cumpla más condiciones para asegurarse de que podrá hacer frente a la deuda que vaya a contraer con el banco.
En este artículo te explicamos todos los detalles sobre las hipotecas para autónomos.
Entonces te podemos ayudar
Pese a que no existen hipotecas específicas para autónomos, las características del préstamo sí podrían cambiar en función de quién sea el titular del mismo.
Por ejemplo, el porcentaje de financiación que conceda el banco sobre el valor de compraventa o de tasación de la vivienda a un autónomo podría ser más bajo que el que le da a un trabajador por cuenta ajena. También el plazo de amortización puede ser más corto, los intereses más elevados e incluso las entidades bancarias podrían exigirle al autónomo que presente un aval para poder ejecutar la operación.
Como hemos dicho, actualmente no existe ningún banco que tenga en su oferta hipotecas solo para autónomos, es decir, un producto específico para autónomos.
Por tanto, lo mejor es contactar el con mayor número de entidades posible y valorar la oferta que estas hagan según tu perfil.
Si eres autónomo y quieres encontrar la mejor hipoteca, lo mejor es acudir a un comparador y asesor hipotecario como iAhorro para que sus expertos te ayuden a negociar las condiciones de tu hipoteca con el banco.
Entre los requisitos que un autónomo tiene que cumplir para que el banco le conceda una hipoteca están algunos básicos como:
- No tener deudas: El titular de la hipoteca deberá contar con un historial crediticio limpio, es decir, sin ninguna deuda pendiente. En caso de tenerla, el banco investigará si esta se está pagando de forma óptima y al día y si puede hacer frente a otra más.
- Contar con unos ahorros de al menos el 30% del valor de la vivienda: De ese 30%, un 20% iría a pagar la entrada o señal de la vivienda y el 10% restante estaría destinado a los gastos de la gestión de la hipoteca. Estos gastos son los mismos que pagaría cualquier persona, por lo que no cambian en caso de que el hipotecado sea autónomo.
- Tener una estabilidad laboral demostrable: La diferencia entre un autónomo y un trabajador por cuenta ajena está sobre todo en que el autónomo tendrá que demostrar que cuenta con unos ingresos estables pese a que su salario no sea fijo.
- Antigüedad: El autónomo que busque hipotecarse deberá haberse dado de alta en la Seguridad Social al menos tres años antes de pedir el préstamo. El recorrido de su negocio también será importante para el banco, así como su solvencia.
La principal ventaja de presentar un aval es que proporciona seguridad al banco porque en caso de impago por parte del titular de la hipoteca, el avalista se haría cargo de la deuda.
Sin embargo, las hipotecas sin aval son las más habituales, incluso para los autónomos, por lo que no sería obligatorio que un autónomo presentara un aval para que le concedieran una hipoteca. Todo dependerá de las exigencias de cada entidad financiera y de la situación económica del futuro hipotecado.
La documentación que necesita un autónomo para pedir una hipoteca sí que varía respecto a la que se le pide a un trabajador por cuenta ajena, ya que será necesario que el autónomo presente documentación relativa a su negocio.
- Dosier informativo sobre la empresa: Aunque no es obligatorio, si el autónomo elabora un dosier en el que se recoja la actividad diaria de su empresa, las opciones de que el banco le conceda el préstamo aumentarán porque así se verificará la estabilidad del negocio, sobre todo si se añade la evolución que este ha experimentado y las proyecciones de futuro del mismo.
- Información fiscal: El banco necesitará comprobar las finanzas de la empresa antes de conceder la hipoteca para saber cuáles son sus ingresos. Además, el autónomo deberá prestar las dos últimas declaraciones de la renta.
- Resumen contable de la empresa: Para completar la información fiscal, el autónomo deberá presentar los modelos trimestrales del IVA, el IRPF o resúmenes anuales de las cuentas de la empresa antes la entidad financiera.
- Vida laboral actualizada: Tanto los trabajadores por cuenta ajena como los autónomos deberán demostrar su una estabilidad laboral y solvencia económica.
- Recibos de los últimos préstamos: Si ha pedido cualquier otro préstamo al banco, el autónomo deberá demostrar que lleva los pagos al día y que podrá compaginar el pago de este préstamo con el pago de la hipoteca.