A la hora de tener que realizar una tasación de la vivienda, es común preguntarse quién la paga. Lo cierto es que la obligación de abonar el coste de este trámite varía según la finalidad.
Como norma general, paga la tasación aquel que la ha solicitado. Por ejemplo, si quieres conocer el valor de una vivienda que vas a comprar para determinar si el precio que estás pagando se ajusta al mismo, lo más natural es que seas tú quién se haga cargo del coste de la tasación (a no ser que llegues a algún tipo de acuerdo con el vendedor).
Sin embargo, en el caso de tratarse de una tasación para solicitar una hipoteca es el cliente el que la paga, en base a la Nueva Ley Hipotecaria de 2019. Prácticamente se trata del único coste de formalización de hipoteca que corre a cuenta del solicitante (al margen de la copia de la escritura).
En todo caso, puedes contratar al tasador de tu elección, siempre y cuando cuente con la correspondiente homologación del Banco de España. En muchas ocasiones, el banco te ofrecerá este servicio para facilitar los trámites, pero tienes que tener en cuenta que los costes de tasación pueden variar de un tasador a otro.